Zara se viste de cuero

No me canso de comprar en Zara. A ver, que no se malinterprete: no es que todos los días paso por un local y me llevo algo. Lo que quiero decir es que atento a como están los precios hoy en día, Zara se ha convertido en una de las mejores opciones a la hora de renovar/abultar el guardarropas. Justamente ayer lo conversaba con una lectora en la fanpage del blog en Facebook: hace unos años, pagar $500 por un blazer de Zara era carísimo pero como esta tienda ha mantenido los mismos precios, ese blazer hoy es una oportunidad.

Teniendo en cuenta la tendencia de sumar cuero (simil cuero para mi) en cuanta prenda se nos ocurra, últimamente busqué ítems de acuerdo a esto y es así como le regalé a mi placard algunas compras para que lo habiten.

Les informo que las fotos no son las ideales: la cámara del celular hace lo que puede. No obstante ello tenía que compartir esto con ustedes:

Pollera tubo con encantador volado trasero ($280).

Leggings con franja de cuerina ($250).

Mi nuevo amor: sobre con cadena y tachitas doradas. Ayer lo vi en rojo en el Zara de Alto Palermo y es igual de monono ($400).

Tiene espacio para guardar cosas a lo largo de todo el sobre. Es perfecto: él lo sabe y yo lo sé ;)

¿Han pasado por Zara en estos días?, ¿algunas compras?

Hablando de compras, ayer aproveché mi visita a Alto Palermo para ver las nuevas colecciones de algunas marcas. 

Me gustó:

• La línea de jeans de colores de Yagmour;
• Las botas combinadas beige y negro de Portsaid;
• Las remeras de Complot (hay una gris -viene en negro también- con estampa de bosque que está bárbara);
• Los sweaters y saquitos de VER (destaco una polera con cuello semi volcado y mangas 3/4 -viene en varios colores-);
• Un pantalón con rayas anchas blanco y negro de María Cher (el precio rondaba los $800);
• Y saliendo de Alto Palermo, camino a Coronel Díaz, me encantaron todos los modelos de botas cortas que propone Clona. Con precios entre los $350 y los $500, había variedad de colores y de tacos. ¡Recomendadísimo!

Espero que les hayan gustado mis compras y si tienen algunos preferidos de temporada les pido que los compartan. Mañana nos volvemos a leer. 

♪ ¡Buena jornada! ♫

Beautyficándome

Desde ya que este es un verbo que no existe pero cuando se trata de probar y renovar productos beauty, la sensación inmediata es que nos embellecemos. Me pasa siempre: compro una nueva sombra y ya veo que mis ojos son divinos; paso por la peluquería para retocar el color y salgo pensando que mi melena es fabulosa. Cuando de sentirnos lindas se trata, no hay nadie como nosotras para levantarnos el ánimo (y lo opuesto también: ¡la autocrítica es fatal!).

Comprar productos beauty me hace sentir mejor conmigo misma. Pienso que estoy invirtiendo en mi belleza y a partir de eso a veces pierdo la noción del gasto pero, en definitiva, termino convenciéndome que es una inversión y me dispongo a disfrutar de mis nuevos compañeros de make up y tratamiento.

¿A ustedes les pasa esto de sentirse lindas desde el preciso momento en que adquieren un nuevo producto beauty? (Lectores varones, los dejo fuera de esta pregunta... lo siento!).

El viernes pasado el día estaba espantoso y yo tenía mucho sueño y mucha fiaca. Salí al mediodía del centro de estética al que estoy asistiendo (ya les contaré) y entre el relax que tenía y la lluvia, lo único que quería era teletransportarme hacia mi cama. Pero no podía: tenía una cita en el espacio de Lancôme en Alto Palermo. A las 14 hs. me estaba esperando David, el encantador maquillador de la marca del que les conté algo acá. Con mis ojeras a cuestas y mis ganas de contar ovejas, David me dijo que me acomodara en el sillón y empezó a hacer su labor. Cuando vi que me iba a poner sombras en color verde, sólo atiné a decirle: "quitame la cara de cansada". ¿Verde? ¡Nunca usé verde! Yo no puedo salir de la gama de los marrones y quizás algún violeta con negro para la noche. En fin, quedé en sus manos y el resultado fue mejor de lo que pensaba.

Por favor, ignoren el peinado. Entre el viento y la lluvia esto es lo más decente que pude estar.

Adoré todos los colores que David usó en mi rostro y quedé enamorada del delineado por debajo de los ojos: sutil pero destacado. ¿Y esos verdes que tanto susto me dieron? ¡Preciosos! Creo que está genial investigar qué colores nos pueden sentar bien a la hora de maquillarnos. Por el color de pelo y de piel, las sombras en verde son para mi.

Les Yeux Doux de Lancôme.

Naturalmente que me olvidé del sueño, la fiaca, la lluvia y el viento. Con el pelo revuelto y un look muy pro-lluvia, me sentía espectacular y con la mirada más impactante. Unos pocos mimos beauty y ya salimos a conquistar el mundo, no?

Dentro de esa atmósfera de belleza las compras dieron el presente, pero no me llevé las sombras sino productos para el cuidado del rostro ya que no le doy mucha importancia a ese aspecto.

Pure Empreinte (máscara de arcilla) y Exfoliance Clarté (exfoliante) ahora son la dupla que una vez por semana se posa sobre mi rostro para mejorar su aspecto. De paso cañazo aproveché que se me había terminado la base y finalmente probé una de Lancôme (deuda pendiente, ¿se acuerdan?). Su nombre es Photogenic Lumessence y es de lo más suave al aplicarla. Love it!

Siguiendo con la renovación de productos de belleza, un día antes de sentarme en el sillón de David y dejarle hacer su arte, fui invitada a conocer las nuevas versiones de dos clásicos perfumes de Armani: Acqua di Gio (para él) y Acqua di Gioia (para nosotras). Ambas reversiones suman al nombre la palabra "Essenza". Con gran énfasis en la belleza que se presenta en la naturaleza, una belleza pura sin artificios, Acqua di Gioia Essenza habla de una mujer radiante, sensual e intensa pero a la vez, natural y sencilla. Las notas fuertes de la fragancia están en los 200 pétalos de las tres variedades de jazmines que se utilizan por cada frasco. Junto con el cedro, la pimienta rosa y el azúcar morena, en este perfume de Armani tenemos el aroma que necesitamos para potenciar la belleza natural que cada una de nosotras trae.

Ese viernes llevé conmigo la fragancia y fue el broche de oro para vivir un mágico momento beauty el cual me permitió olvidar todas esas cosas que le sacan puntos a un día rutinario.

¡Cuéntenme! ¿Se han sentido de esta forma alguna vez?, ¿con cero ánimo y ganas de estar en piyama que se olvida rápidamente luego de una sesión de compras de belleza o el uso de algún perfume? Considero que como se vea nuestra mirada y nuestro pelo además de la fragancia que usemos, todo eso contribuye a sentirnos divinas a pesar del contexto... ¿qué piensan?

Les pido disculpas por la demora del post de hoy. Estuve temprano en la presentación de colección de Yagmour y de Claude Benard así que pronto les traeré esas novedades.

Van besos perfumados y llenos de colores... ¡feliz pre viernes! ♫

PD: Las fotos del maquillaje le corresponden a David Dagliano. ¡Muchas gracias!

Zara es ♥

Me encanta Zara. Lo he dicho una y mil veces y así seguirá siendo porque lo nuestro es amor. Siempre encuentro algo que me guste y es EL lugar para adquirir un blazer que no sólo esté bien confeccionado sino que además tenga un precio moderado.

Si bien durante este año nuestro romance entró en una etapa de crisis gracias a los ya sabidos conflictos con la Aduana y las importaciones, hace unas semanas nos reencontramos con la pasión activada y las ganas de seguir unidas por mucho tiempo más. Compartiendo espacio con las prendas en liquidación (aún quedan varias en Alto Palermo y Patio Bullrich), la mayor parte de los locales de Zara se viste de primavera y mi tarjeta baila de júbilo al compás de las perchas.

El viernes pasado y luego de un exquisito maquillaje que me hicieron en Lancôme de Alto Palermo (mañana les cuento al respecto), me regalé un paseo por Zara y me encontré con la sorpresa de que la colección de Primavera es una belleza. Mucho color, flores, vestidos, blazers estampados, polleras largas y más. Los precios no son nada disparatados y rondan, en promedio, los $300 (los blazers están más caros: entre $500 y $700 -siempre están en ese rango de precios-). Queriendo llevarme todo pero alertada por mi tarjeta que avisaba a los gritos que aún no había cerrado su facturación del mes, me traje conmigo un vestido y un saquito. 

Este vestido me resultó encantador cuando lo vi en otra persona y en otro color días atrás de mi compra. Lo encontré en ambos colores (la otra combinación es en azul y turquesa) pero me gustó en amarillo. El precio es de $300 aprox.

Pajaritos primaverales que se mueren por tener una temperatura de 20° durante el día. Soy fan del inverno pero ya me aburrió.

Como aún no estamos para andar con los brazos al aire, le sumé a mi vestido este saquito super delicado con el monono detalle de encaje en hombros y nuca. Lo vi en tres colores más y casi que me llevo dos pero, ya saben, la tarjeta me hacía señas dementes para que no gaste más y sólo hice mío el de color negro ($330 aprox.).

El sábado estuve en Paseo Alcorta y dejé señado con mis ojos un vestido de estampa floral y tela simil gasa.  Esa será mi compra esta semana y de seguro pronto lo conocerán por este medio.

¿Ya han pasado por Zara en estos días?, ¿les gustó la nueva colección?, ¿y mis compras?

Para el jueves tendremos un día beauty hablando de make up, perfumes y más compras ;)
¡Feliz mitad de semana! ♥

Amor a primera vista con Lancôme

Miércoles pasado. Sms matinal de mi Mamá invitándome a que nos encontremos un ratito en Alto Palermo. Plan inesperado, respuesta afirmativa asegurada. Mientras voy -tarde- camino al shopping, le escribo preguntando dónde nos encontramos. "En el stand de Lancôme. Tengo que chequear mis puntos". Oración inofensiva: nos vemos en el stand y de ahí, a lo nuestro. 

Llego, la veo y me quedo esperándola mientras conversa con el maquillador. Miro todo, agarro algunos productos y no sé en qué momento di un salto cuántico en el tiempo y el espacio y me encontré siendo maquillada por David mientras le decía: "quiero este, también este y me parece que este".

Esas son las cosas que nos pasan a las mujeres cuando no tenemos expectativas de compras pero, sin embargo, terminamos arrasando con algo.

Con Lancôme tengo un romance desde que soy adolescente. Recuerdo que cerca de mis 13 años, mi Mamá usaba toda la batería de cremas de la marca y yo, que de cosméticos no entendía nada, me quedaba observando ese ritual de belleza que me tentaba a salir de mi traje de niña para probar jugar a ser mujer.

Tiempo después, cuando me aproximaba a los 20, mi Mamá me regaló un khôl negro (delineador) de Lancôme que aún atesoro y ya casi es del mismo largo que la tapa. Me sentía divine usándolo y a partir de ese momento y hasta el día de hoy, Lancôme me ha acompañado aportando su belleza.
¿Les ha pasado algo así con una marca?

Volviendo a ese mediodía, me dejé maquillar y escuché todo los trucos que David me daba. "Pintar los pómulos con rubor desde la manzanita de los cachetes hasta todo el largo que va de la sien a la mandíbula"; "Utilizar corrector de ojeras en todo el círculo alrededor del ojo, hueso de la nariz, bordes de la misma y un poco en la pera"; "Para agrandar los labios, delinear por arriba de la línea de los mismos y luego rellenar con labial o laca", y así seguía la charla.

¿Qué me llevé? De todo! Aunque pregunté por el nuevo labial Rouge in Love, compré de todo menos eso.

Rubor, laca para labios, corrector e iluminador. Una batería completa de productos de Lancôme.

Iluminador (Moonlight -103-). Perfecto para usar en el arco de la ceja pero si lo esparcimos con el dedo y suavemente alrededor de todo el ojo (ojeras incluidas), da luz en esa área y nos aporta lozanía en el rostro.

Rubor (Pink Splash -21-). Además de ser un rosa clásico (ese color que nos queda cuando andamos con las mejillas ruborizadas), tiene unos brillitos que destacan aún más el rosado.

Corrector de ojeras (Beige Sable -02-). Un hallazgo. Hace varios años que vengo usando uno de Dior pero cuando probé este y noté lo bien que se esparcía en mis ojeras y nariz, lo amé. Ni bien lo uso luego de la base, quedo perfecta para salir a la calle sin tener que usar nada más.

Laca para labios (Marilyn Beige -210-), No me gusta usar labiales porque siento que ninguno me queda bien. David, al notar mi escepticismo en este tipo de productos, me probó esta laca y me encantó. El color es un poco más que el natural de los labios y lo bueno de esta laca es que dura horas sin correrse.

Finalmente, de regalo me dieron un mini labial Rouge in Love así que, de cierta forma, me llevé lo que quería.

Los productos de Lancôme no son baratos pero están en el mismo rango de precios que todos las marcas en su gama. No tienen por qué ser compulsivas como yo y llevarse cuatro cosas: con una de estas basta para que noten un cambio en su rutina de make up; y sepan que es super importante usar productos de calidad porque si no se nota y además la piel de nuestro rostro luego sufre las consecuencias.
En el stand de Lancôme de Alto Palermo aceptan hasta 3 cuotas sin interés y también tienen cofres que incluyen varios productos y a buen precio.

Por si se preguntaban cómo terminó esa jornada, les cuento que jamás alcanzamos a almorzar y tuvimos que salir corriendo del shopping porque llegábamos tarde a nuestros compromisos. Eso sí, nos fuimos felices!

Imagino que han sufrido compulsiones de este tipo... espero sus comentarios para saber qué los pierde en materia de indumentaria o de belleza.

Parto a la calle tempranito que hoy la jornada es larga.
Besos con mejillas ruborizadas ♥

Semana Wishlist: Blaqué + polémica de precios

Ayer ya estuve averiguando por algunos ítems de esta gran lista y pasé por el local de Allô Martínez en Alto Palermo. Por desgracia varias de las cosas que quería aún no habían llegado pero tanto los martes como los jueves está entrando nueva mercadería así que espero poder meter en mi valija el vestido camisero que les mostré el lunes.

Respecto de las prendas de Tucci que me gustaron, me parece que la visita a alguno de sus locales quedará para después del viaje porque no le alcanzan las horas a mis días. Pensar que recién salimos de un fin de semana super XL y ya me siento agotada; no sé si es porque mi cabeza no para de generar ideas o porque simplemente los años se hacen notar. 

Pero vamos a lo nuestro que esta semana es una gran lista de deseos y para esta jornada el elegido es Blaqué. Esta marca de carteras, calzado y accesorios ha sabido adecuarse a las tendencias y sobrevivir al paso del tiempo manteniendo precios y calidad. Tengo una sola cartera de la marca que más encima compré en el outlet así que tengo cero fanatismo por sus creaciones. No obstante ello, me gustan sus diseños y también la evolución de la línea de calzado (¿se acuerdan de mis super plataformas a lo Prada?).

En mi wishlist incluí varias carteras (todas son de cuero) así como también un par de botas cuyo precio me parece un despropósito, pero veamos las fotos primero y luego abrimos la polémica (!).

$408

$558

$562

$619

$1100 (también viene en beige)

Como ven, las carteras son un primor absoluto y el azul llamó mucho mi atención porque no lo he visto demasiado en otras marcas. De igual forma quedé enamoradísima de estas botas texanas con estrella de tachas/tuercas/whatever pero el precio me cayó como balde de agua fría. ¿No es demasiado para unas botinetas? 

En mi visita por Alto Palermo y luego caminando por Av. Santa Fé, me encontré con un modelo casi idéntico pero con distinto taco y color. Lo mejor es su precio a casi la mitad que el de Blaqué.

Este par lo encuentran en el local de Cherry, en Av. Santa Fé entre Larrea y Av. Pueyrredón. Es más, si caminan media cuadra por Av. Santa Fé, podrán encontrarse con una vidriera de Blaqué que luce el modelo en cuestión y a precio duplicado.

A mi me gusta comprar pero no me gusta que me timen. $1100 es too much por un par de botitas. ¡Y ni hablemos de los mocasines que rondan el mismo precio! Ayer vi unos en Ayres, negros con tachitas, a $1100. Cacharel, el local de al lado, tenía unas preciosas botas tipo de montar al mismo precio. Mi pregunta es: ¿qué tienen en cuenta a la hora de ponerle una cifra al calzado? Si el mocasin es de cuero, simple, con tachas y nada más, y la bota es larga, con detalles y taco, ¿es correcto que cuesten lo mismo?

No tengo nada en contra de Blaqué. Por el contrario, adoré sus modelos de carteras; pero con las botas se fueron a la estratósfera.

¿Ustedes qué opinan?

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PD: Le agradezco a Flor la foto de las botas sacada con su celu (el mío, como siempre, funciona mal).

Una noche al rojo vivo: compras en Alto Palermo

El en día de ayer me cité con Pri para irnos de shopping por Alto Palermo. Tenía muchas ganas de comprar y sabía que mi objetivo era pasar por Zara y luego buscar un jean.

Un ratito antes nos encontramos con Andrea, la ganadora del último sorteo y reciente blogger, para entregarle sus premios. Como hubo buena onda desde el primer contacto, nos regalamos una charla amena y llena de risas en Starbucks así que mi visita al shopping empezó con el pie derecho. La verdad es que es un placer total disfrutar de la clásica charla de chicas: te relajás y te mostrás tal cual sos. Alegría asegurada.

Como el tiempo apremiaba ya que el shopping está abierto hasta las 22 hs., empezamos nuestra recorrida con Pri como quien no quiere la cosa. Con la misma actitud seguímos dentro de Zara (que, dicho sea de paso, tenía cosas más lindas la sucursal de Paseo Alcorta -estuve el domingo-) hasta que empecé a sumar prendas a mi brazo para llevar al probador. Justo cuando estaba por decir con cuántas prendas entraba, vi que una chica le comentaba a otra lo cómodo de un pantalón negro onda legging pero "con forma" y que lo sentía "como segunda piel". Inmediatamente me metí en la charla para saber dónde lo había sacado y así lo sumé a mis elecciones.

De todo lo que vi rescaté dos prendas: las leggings con corte de pantalón y un vestido.

Como pueden ver, tiene forma de pantalón pero es legging, bien gruesa -no llega a ser jegging-. Me gustó el tiro y como calza. Está aproximadamente $220 y lo vi sólo en negro (en las mesas del fondo, cerca de TRF).

(Disculpen la foto movida pero fue esta mañana mientras corría a arreglarme para salir y Mini me mordía los pies cada vez que me quedaba quieta). Este vestido tiene un corte comodísimo con elástico que no ajusta demasiado arriba del ombligo. Es tipo gasa y lo veo perfecto para medias opacas y zapatos o botas largas. Me encantó. El precio es de $240 y también viene en un modelo con flores amarillas en fondo azul.

¡No alcancé ni a sacarle las etiquetas!

Pri salió con las manos vacías luego del chasco de una camisa que siempre veía y no se probaba y que, luego de ver cómo le quedaba, la tela y el corte era similar al de un guardapolvo de maestra jardinera.

Ahora el objetivo era el jean pero frente a Zara estaba María Cher y como ya les conté hace unos días, la colección me había enamorado. Justamente en el post que hice sobre la marca, Trapoholica me había comentado que los jeans eran geniales y nunca olvidé ese dato por lo que entré al local a ver con qué me sorprendía. Dicho y hecho, los jeans son fantásticos. De primeras, el tiro es medio o alto por lo que todo queda en su lugar. Además marcan bien las piernas y tienen talles del 26 al 32 lo que invita a que la mayoría de nosotras entre uno de sus pantalones. La sorpresa me la llevé cuando vi el modelo "nevado" en cuatro colores: rojo, mostaza, verde y celeste.

Obviamente me probé uno y haciéndole honor a mi compulsión, me llevé dos.

¿No es divine? La foto no le hace justicia al color (en la próxima se ve el color real). Tiro medio y chupin.

Modelo babucha. ¿Qué es esto? Tiro largo, bolsillos a los costados y piernas ajustadas. El efecto visual es de piernas estilizadas y caderas contenidas. Dudé y dudé pero me lo llevé. Pri se metió en el vendaval compulsivo y se llevó uno igual.

Así me veo hoy con el jean babucha. Aproveché el espejo en el showroom de Perfectos Dragones (marca de accesorios que nos invitó a un desayuno de prensa y de la que podrán ver post la próxima semana) para mostrarles el look completo. La camisa y el saco son de Zara, los mocasines son de Prüne y la bandolera es de Lazaro (mononura de cuero, charol y animal print de esta temporada). El pelo con frizz se lo debo a la humedad :)

Confieso que me resulta medio raro andar con el tiro sin ajustar donde debe pero es cosa de costúmbre. El jean es cómodo y me gusta como queda. Los precios son caros, no lo puedo negar (más o menos $500 cada pantalón) pero hay 12 cuotas sin interés con American Express y 3 con el resto de las tarjetas.

Terminadas las compras estábamos por irnos del shopping hasta que nos detuvo la vidriera de Desiderata. En el BAFWeek pasado había visto unos jeans con efecto desteñido (no llegan a ser nevados... ¡me encanta usar esta palabra retro!) y ahí estaban en los percheros. El precio es de $520 y si bien me los probé y me gustaron, necesitaba un talle menos que no tenían. Para mi grata sorpresa, en el día de hoy pagando con Santander hay 35% de descuento por lo que en un rato haré parada táctica en el local de Callao y Santa Fé.

Como dato general les cuento que pasamos por Complot (no me gustó lo que vi y las prendas se notaban mal confeccionadas para el precio), Las Pepas (divinos mocasines con glitter sutil a $890... ¡too much!), Muaa! (la colección de Mariano Toledo no se veía muy feliz, una pena) y Ayres (nada deslumbrante). También vimos un modelo de mocasín animal print con pelo en 47Street, Sibyl Vane, Hush Puppies y MaggioRosetto. La versión más barata está en 47Street a $480 y la más cara en MaggioRosetto (cerca de $900).  Tengo ganas de comprármelos pero me parece que los va a tener todo el mundo así que quizás opto por otro modelo.

¿Qué me cuentan de estas compras?

¿Ya pasaron por el shopping a hacerse autoregalos?

¡Besos con nubes y rumor a otoño!